"LA MISIÓN DE BUCEO ES DIFÍCIL Y CALLADA"... con esa premisa llegamos al C.B.A (centro de buceo de la armada) para realizar un intensivo curso en el que tuvimos que absorber como esponjas todo lo que el magnífico grupo de instructores estimaron necesario para merecerse las dos estrellas que otorga la realización de dicho curso y salir airosos de esta pequeña aventura bajo el mar.
Primera toma de contacto con las instalaciones, material y prueba excluyente de este curso, simulación de inmersión a 30 m en la cámara hiperbárica.
Cada mañana antes de comenzar recibimos un briefing sobre la actividad a desarrollar esa jornada y posteriormente dos horas de clases teóricas para reforzar la práctica.
Aquí nuestras compañeras inseparables durante estas tres semanas, otros alumnos de la escuela más aventajados.
Susana, mi pareja de baile gracias a la cual se hizo todo mucho más fácil y ameno. Como cada día, el ritual de preparación para las prácticas en la piscina.
Empieza a animarse poco a poco la cosa y ya nos vamos adaptando poco a poco al medio con cada ejercicio. "Cabo Cañaveral" sería la prueba definitiva que nos diría si estamos preparaos o no para meternos en el agua de verdad. Pasados algunos momentos de tensión y agobios todos conseguimos el pasaporte a mar abierto.
Llega uno de los días clave del curso, nuestra primera inmersión en el mar. Es hora de aplicar todo lo aprendido y no dejar lugar a errores anteriores. Ahora la cosa va en serio... algunos charlan y otros prefieren esperar más concentrados.
En nuestra primera inmersión no nos alejamos demasiado, aun así llegamos a los 15 m de profundidad y empezamos a disfrutar de verdad, además el fabuloso grupo de instructores lo hacen todo mucho más ameno y siempre encuentran un momento para darle otra vuelta de tuerca a nuestra diversión.
Ya cada mañana y hasta la finalización del curso seguimos el protocolo aprendido y empezamos a movernos con un poco más de soltura.
El buceo siempre es osa de dos y la compenetración con la pareja es indispensable. Aun más lo es tener a tu lado unos buenos monitores. Nosotros por suerte tuvimos a los mejores del mundo... Buenos profesores y mejores personas hacia los cuales solo hay palabras de agradecimiento por su paciencia e interés...
Otra de las pruebas clave realizada en el tanque de inmersión. Destreza con el manejo del equipo y salida de emergencia a escape libre.
Tras dos semanas ya va todo sobre ruedas y casi empezamos a parecer verdaderos buceadores...
De principio a fin de la inmersión seguimos más que nunca las pautas de nuestro instructor e intentamos no olvidar ninguno de los pasos aprendidos. Cada día bajamos un poco más y la cosa se pone más seria.
Tras muchos años cumplo uno de mis sueños, estoy casi a 30 m y empiezo a ver cositas... Cad rincón que encontramos se nos muestra como un tesoro.
Y no cesan nuestras ganas de descubrirlos...
Si algo ha caracterizado a estas tres semanas ha sido el buen ambiente y compañerismo, aquí una muestra de ello.. Tras una agotadora jornada hay que reponer fuerzas.
Otro de los momentos claves del curso, poder ver de primera mano la profesionalidad de nuestras fuerzas armadas mientras realizan maniobras de rescate.
Las caras después de cada inmersión lo dicen todo... Como cada día debemos cuidar minuciosamente el delicado material.
Ya estamos en la tercera semana y parece que llevamos toda la vida juntos. Todo resulta ya más facil pero no dejamos de aprender y tomamos cada inmersión con el respeto y cuidado que merece.
El curso va segun lo previsto y los monitores deciden premiar nuestro interés con varias inmersiones inolvidables... "Cueva de la virgen" y " Cueva del agua" serán los platos fuertes de este curso.

Hasta el más mínimo detalle está previsto y nada queda a la improvisación.
Mis ángeles de la guarda.
De los lugares más bonitos y mágicos en los que nunca he estado.."Cueva de la Virgen"
El pintoresco arco de roca natural marca el sitio de fondeo para acceder a la "Cueva del lago"
Todo listo dentro y fuera del agua...
Puerta de entrada hacia la cueva del lago... una de las joyas geológicas de la región.
Una vez dentro volvemos a salir a superficie y quedamos fascinados por sus aguas turquesas.
Ahora toca un poco de espeleo en busca del famoso lago.
Poco a poco la cueva se va abriendo y llegamos a nuestro merecido premio... Sin duda el mejor baño de mi vida..
Fin a estas inolvidables tres semanas con todos vosotros... MIL GRACIAS!!!
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