FICHA DE RUTA:
Cómo llegar
» Parking principal y recomendado por los equipadores Si venimos de Lleida por la N-230 antes de cruzar el puente para entrar al Pont de Suert tomamos la calle de Aragón de frente, hasta la escuela de montaña. Podemos aparcar junto a la escuela.
» Si venimos de Vielha por la N-230 antes de entrar al Pont de Suert tomamos la calle a la derecha que nos lleva al Barrio Roser Viviendas, 9 edificios cuadrados de ladrillo (antes de la pista de tenis que se encuentra a mano izquierda, al finalizar la curva de la N-230 y antes de la recta de los Mossos). Bajamos por la calle hasta el río y aparcamos junto a un puente metálico.
Acceso
La aproximación es común para los dos aparcamientos con la diferencia que si venimos de la escuela de montaña no deberemos cruzar el puente pero si caminar un poco más junto al río (Camí de l'Aigua). Una vez a la altura del puente metálico encontraremos en un árbol el indicador de madera (Via ferrada) que nos lleva hacia arriba a la izquierda. Seguiremos las marcas amarillas y VF. El camino es primero una pista ancha que sube fuerte en zig-zag junto a una canalización de aguas. Al final de la pista el sendero se introduce por un caminito a la derecha, atención fitas, que va llaneando hasta el inicio de la ferrata.
Recorrido
En esta vía ferrata nos espera un poco de todo. Está tan bien planificada que las dificultades las vamos encontrando gradualmente, así que si en algún punto no lo vemos claro podemos tomar uno de los cuatro escapes señalizados (azul). Esto la hace ideal para llevar a principiantes puesto que además dispone de colas de cerdo para facilitar el seguro desde arriba con una cuerda adicional.
Dividida en tres tramos, es en el último donde la vía se pone más exigente, con un desplomado aéreo y una primera placa inclinada donde deberemos escalar. Pero no pensemos que los dos primeros tramos están exentos de dificultad pues también tienen sus partes interesantes.
En el primer tramo los puentes nepalís se encargan del asunto, aunque son opcionales, recomendamos pasarlos pues al final hay un paso aéreo en la arista entretenido. Subiendo en vertical nos acercamos al final del primer tramo, una pequeña aguja con vistas al Pont de Suert.
El segundo tramo sin ser complicado quizá tenga los pasos más aéreos de la vía, siempre con buenos agarres, nos deja en la cima de un espolón que a ratos desploma ligeramente. Encontramos a la derecha el primer bidón para dejar nuestras impresiones si ya hemos tenido suficiente y queremos regresar.
Merece la pena seguir hacia el tercer tramo, tanto por el desplomado final, de unas 6 grapas, como por los primeros pasos de escalada en la placa inclinada donde tendremos que buscar la roca para subir. Al final podemos dejar nuestra firma mientras nos deleitamos de las vistas al valle de Boí, al Pont de Suert y al Noguera Ribagorçana. Opcionalmente podemos lanzarnos por la tirolina, de unos 25 metros y casi horizontal (polea de cable y guantes obligatorios). Dependiendo de la polea llegaremos al otro extremo o nos veremos obligados a tirar de brazos desde la mitad.
Como curiosidad decir que aunque la ferrata se mantiene desde la escuela de montaña de Pont de Suert la misma se encuentra en territorio aragonés, así que estrictamente debería sumársele una ferrata más a esta comunidad.
Regreso
Indicado con marcas azules y amarillas comparte gran parte del camino de la ferrata y la aproximación. Consta de un par de tramos equipados por los que se puede bajar asegurado. En algunos puntos el sendero está un poco descompuesto pero se deja hacer.
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